01 enero 2008

Oscarizables (I): LOS LUGARÍSIMOS COMUNES-COMUNISTAS DE DENZEL

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THE GREAT DEBATERS (2007)
Director: Denzel Washington
Los miembros del equipo de debate de la universidad de Wiley: Samantha, Henry y el chamo James Junior. James Junior está empepado solo por Samantha, pero Samantha no está por la labor de cambiar pañales. Henry, mientras, deberá aprender el sentido de la responsabilidad y el valor de los sentimientos. Bla-bla-bla
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Del lote de películas candidatas a Globos de Oro y Oscar que se estrenó a finales de diciembre en Estados Unidos, creo que ésta es la primera que llega a Venezuela. Nota: el DVD pirata que circula de THE GREAT DEBATERS es una copia para miembros de jurado de la compañía de los hermanos Weinstein, por lo que su calidad es bastante buena... con la excepción de que los subtítulos en español son de la famosa gente de MEDIARTE. Aunque la subtitulación es mejor que el promedio de las de MEDIARTE, pues MEDIARTE es MEDIARTE hasta la sepultura. MEDIARTE = MEARTE.
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Existe ya todo un subgénero de películas sobre negros que "superan barreras" y derrotan a la discriminación en el siglo pasado. Por ejemplo, en el Cineclub de Directv están pasando AKEELAH AND THE BEE, un filme sobre una negra (Angela Bassett) que gana un concurso de deletreo. THE GREAT DEBATERS, sobre el equipo de debate de la universidad sureña negra de Wiley que le ganó un campeonato de retórica a los blanquitos de Harvard en 1935, es una colección de todos los lugares comunes de las películas elaboradas exclusivamente para obtener postulaciones al Oscar —con frecuencia, una de las peores temporadas fílmicas de cada año—, con su buena dosis de maniqueísmo y manipulación. Aquí todo blanco es negro por dentro. THE GREAT DEBATERS es tan lugar común, que hasta finaliza con los estúpidos cartelitos en los que te explian qué fue de la vida de los protagonistas años después. Todos triunfantes, todos felices, todos haciendo cosas nobles. Ahora, yo me pregunto ingenuamente: ¿por qué coño los negros tienen que ganar un debate en la universidad de los blanquitos para obtener legitimidad? ¿No es esa otra forma de auto-discriminación y auto-minusvalía? Si la moraleja es: "Los negros también pensamos", ¿la premisa de fondo no parte de uno de los supuestos más terribles y atávicos del racismo?
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Como ocurre en este tipo de películas, paralelamente a la historia principal, circulan otras subtramas de refuerzo piche. Veamos:
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1. El poeta y profesor de debate Melvin Tolson (Denzel Washington) posee ideas sindicalistas que colindan con el comunismo, por lo que se convierte en un perseguido político en un Sur de Estados Unidos donde queman a los negros vivos. La interpretación del director-actor Denzelito entra a la historia de los lugarísimos comunes de profesores intimidantes del séptimo arte. Esos profesores que te hacen reírte y entonces, cuando te ríes, te joden con la guardia baja porque te reíste, ya que lo que dijo no era para nada un chiste. Qué predecible.
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2. El más chamo del equipo de debates, James Junior Farmer (Denzel Whitaker), que tiene apenas 14 años, se enamora de la única chama que logra ser aceptada en el clan de los retóricos entrenados por el profesor Tolson, Samantha Booke. Pero Samantha se acuesta con el más encantador de los debateros, Henry Lowe (Nate Parker).
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3. El prepotente Henry Lowe, a su vez, tiene debilidad por el alcohol, las chicas fáciles y la vida nocturna, aunque al ser nombrado jefe del grupo de debates, adquiere nociones de responsabilidad y respeto.
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ESCENAS DEPLORABLES DE THE GREAT DEBATERS:
1. La escena del debate final es deplorable porque se pierde el sentido de lo que significa la retórica, que es una disciplina neutra en la que no importa la verdad o la mentira, lo positivo o lo negativo, sino la solidez de la argumentación.
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2. Hay una escena horrible en la que los negros de Wiley debaten contra chamos blancos sureños en una especie de tenderete en un descampado rural. Los campesinos asisten al debate y exclaman "¡Oh, sí! ¡Es verdad!" cada vez que alguno de los universitarios dice una frase impactante.
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3. El profesor Melvin Tolson le enseña a sus debateadores una especie de lema caletre pseudo-religioso (¿un comunista fanático religioso? ¡Ésa no existe!) que no tiene ningún sentido racional. En una de las escenas finales, cuando el profesor está ausente, los tres chicos repiten el caletre mecánicamente y lloran. Qué predecible. Mi hermano decía que no hay nada más feo que un negro llorando. Disculpen la cita racista.
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Ah, por cierto. Forest Whitaker aparece por ahí haciendo un papel poco relevante de padre de Denzel Whitaker (no es su hijo en la vida real). Es el negro muy sabio y docto, pero sumiso, que luego aprende a pelear por sus derechos. Qué linda es la vida, chico.

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